viernes, 23 de septiembre de 2016

10 Tips para iniciar y mantener procesos de cambio - Primera parte

¿ Qué es el cambio :   El cambio es el proceso de ir de nuestro estado actual, a un estado deseado y que consideramos será beneficios y positivo para nosotros y quienes nos rodean. Puede ser sobre algo cotidiano y concreto como alimentarnos de forma saludable, o algo más complejo y abstracto como desarrollar una habilidad, o modificar una conducta que observamos es perjudicial para nosotros.

Muchos intentos de cambio, quedan en eso, en simple intenciones, hecho que nos frustra y nos impide alcanzar esa meta que deseamos. Ante que nada tienes que saber que el cambio cuesta, no te sucede sólo a ti, en general a las personas se les dificulta bastante implementar nuevos comportamientos. Nuestro cerebro tiende a economizar recursos, y evita la transformación, ya que implica cierto riesgo e incertidumbre que tenemos que aprender a gestionar adecuadamente, si es que queremos ese estado deseado.

Para que que te sea más útil las recomendaciones que te voy a brindar para lograr tus objetivos, te voy brindar tips específico para que apliques antes, durante y después del cambio.

Antes de iniciar el cambio es importante que sepas que:

1- El cambio implica esfuerzos: Desde recientes investigaciones de las neurociencias se nos confirma lo que todo ya sospechábamos, el cambio es difícil, delicado, y frágil. Cambiar nos enfrenta a desafíos y cierto conflicto ya que romper de alguna manera con el pasado nos genera ansiedad y malestar, nos saca de la zona de confort. Pero no salir nos frustra, nos ata a conductas muchas veces nocivas y nos impide crecer. Cuando no logres el cambio que querés de primera ten presente que es una característica compartida por los seres humanos y ten paciencia contigo mismo.


2-Usa tu mente para cambiar tu cerebro: Las creencias que tenemos sobre la posibilidad de que ocurra el cambio que queremos son claves. Pueden tanto facilitarlo como obstaculizarlo. Para prevenir esto es importante que sepas que mente y cerebro no son lo mismo, y que tu mente, las creencias que tienen moldean tu cerebro gracias a la neuroplasticidad de este.  El cerebro está constituido por tus neuronas y sus conexiones —llamadas sinapsis—, que forman circuitos o “cables”. La mente o actividad mental son tus pensamientos y emociones que corren por tu sistema operativo, que es el cerebro. Tu mente puede modificar tu cerebro. Ella es una fuente de actividad tal que, mediante entrenamiento y auto-conocimiento, puede modificar la estructura de tu cerebro.

3- Que tu viejo yo se lleve bien con tu nuevo yo: Es fundamental que cambio que quieres implementar vaya de acuerdo a tus valores, de lo que consideras tu esencia, el nuevo yo que estás gestando tiene que relacionarse bien con tu antiguo yo, para que la transición sea pacifica y exitosa.


4- Es mala estrategia impulsar el cambio desde el miedo, la amenaza o la crítica: El miedo, la auto- critica despiadada, lejos están de fomentar nuestra motivación y de brindarnos un estado propicio para cambiar.  Además perjudican de manera directa tu desempeño cognitivo. Resolver problemas, equivocarte menos, tomar buenas decisiones, ser creativo, manejar el estrés, colaborar y sentirte motivado empeoran bajo amenaza. Durante los procesos de cambio, trátate con amabilidad.

5- Las creencias sobre el cambio y tu capacidad de realizarlo determinará si lo consigues o no: Tanto si piensas que puedes realizar como si no, incidirás en la posibilidad del cambio. Cuando creemos que es posible el cambio se activan aéreas de nuestro cerebro que nos ayudan concretarlo, y a darnos cuenta de posibilidades y oportunidades para hacerlo.

6- Si vas a cambiar, fallarás, asúmelo: Es importante saber de antemano para no desmotivarnos si sucede que camino hacia el cambio habrá retrasos, equivocaciones, fallos, etc. Ya que generar un cambio siempre ofrece resistencia, en la realidad, en quienes nos rodean y en nosotros mismos. Si lo sabes cuando ocurra serás tolerante con esas equivocaciones y de modo perseverante seguirás caminando hacia tu meta.

7- Establecer expectativas correctas, ni demasiado bajas, ni demasiado altas: Si es excesiva, te vas a frenar en la acción. Para que esto no pase, la clave es conocerte a vos mismo para establecerte expectativas “correctas”. Expectativas bajas o negativas tampoco son adecuadas, te llevarán directo a la frustración o al aburrimiento.

8- Escribe el objetivo en primera y en positivo: Para alcanzar el cambio tenemos que definir nuestros objetivos claramente. Lo más concreto posible. Escribe lo que es más importante para ti en un papel, luego de hacerlo, pon el papel en un lugar visible donde lo puedas ver a diario. De esta manera lo tendrás presente y no te distraerás de tu meta. Focaliza más en lo que te gusta que en lo que no te gusta.

9-  Organízate y busca ayuda cuando lo necesites:  Busca ayuda, no seas caigas en la omnipotencia, consulta, pregunta, solicita información y colaboración cuando sea necesario.


10- Utiliza métodos para el logro y la formulación inteligente de objetivos: Te comparto el modelo Smart para que lo puedas definir de forma correcta. Al plantearte objetivos tienes que verificar que sean:

Específicos: Si los objetivos son ambiguos o incompletos los resultados también lo serán. Pregúntate ¿Qué quiero lograr exactamente?
Medible: Hay que establecer un indicador ¿Cómo se que estoy consiguiendo resultados? 
Alcanzable: El objetivo debe ser posible de llevarse a cabo. ¿Qué habilidades o recursos necesito?
Realista: Esto depende de los recursos, habilidades, conocimiento de cada persona
Y además tienen que ser: 
Acotado en el tiempo:Ni tan corto que sea imposible realizarlo, ni tan largo que disperse las acciones
Formulados por aproximación: Deben acercar al resultado que buscas, más que evitarlo.
Con sentido:  Deben ser significativo para quien los formula.
Determinados por voluntad propia: y en armonía con sus valores e intereses
En próximos post compartiremos como mantener los procesos de cambios.
Lic. Psic. Fernanda López