¿Qué podemos aprender de la forma de ver el mundo de estas personas?¿Cómo podemos desarrollar esta sensibilidad para disfrutar de sus beneficios?
La psicología positiva ha llamado esta forma de percepción “apreciación de la belleza y excelencia” y señala que es una de las fortalezas humanas, es decir un comportamiento humano, que en algunas personas se da de forma natural y permiten su oprimo funcionamiento y desarrollo, brindándole energía y bienestar.
Lo que provoca la apreciación de la belleza es algo personal, lo importante es no perder la capacidad de asombro ante lo que nos rodea, algo que en la sociedad actual apática y sobrecargada de información es cada vez más difícil.
Claire Wheeler ha propuesto cinco maneras de recuperar y desarrollar el sentido de admiración para sentirse más inspirado, feliz y conectado:
1. Hacer una caminata concentrado, caminado lentamente y con la intención de experimentar el mundo manteniendo alerta los sentidos. Muchas veces esta actitud alcanza para encontrar una gran cantidad de belleza que pasa desapercibida a nuestro alrededor.
2. Realizar algo diferente cada día. Tomar un camino diferente, hacer una pausa de descanso en el trabajo e ir a tomar un café, etc. Incorporar elementos novedosos nos permite estar más atento a lo que pasa aumentando la probabilidad de percibir algo digno de admiración.
3. Reservar un tiempo para admirar las cosas que considere bellas, una corriente artística, la naturaleza, flores, etc.
4. Conviértase en un fotógrafo aficionado, hoy la tecnología permite hacerlo fácilmente. Saque fotos de aquello que considere bello durante un mes todos los días. Esta práctica le permitirá encontrar cada vez más personas, lugares y cosas bellas.
5. Lea biografías y memorias de personas que han logrado cosas que admira.
Lic. Psic. Fernanda López Romano
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